Si hay algo que le agrada a una británica y que la pone muy cachonda, eso es las fiestas que se montan con negros donde se ponen a joder como locas debido al efecto que generan tener delante de sus narices semejantes rabos. Al comienzo semeja que no saben realmente bien que hacer con ellas puesto que con semejante tamaño se piensan si metérselas ante por el coño, por la boca o bien por el trasero, si bien bueno, lo mejor de todo y más disfrutable es ver de qué manera las que están buenorras se tiran sobre la barra y espera a que algún hombretón hecho y derecho les levante el vestido de choni y comiencen a darle duro. No os voy a mentir, hay maduras que no es que tengan unos cuerpos increíbles, sin embargo me han puesto perrísimo.
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