Esta checa treintañera decide hacerse una sesión de fotografías provocativa para su novio. Su relación se ha atascado un tanto y ya no sabe qué hacer para llamar su atención. Cuando su novio se marcha de viaje, a la chavala se le ocurre hacerse una sesión de fotografías y ponerle muy cachondo a fin de que cuando vuelva la folle duro.
Llama a un fotógrafo profesional que se dedica a esto y se prepara para su sesión. Primero posa con ropa, poniendo carita de viciosa y poquito a poco se la va quitando. Cuando abre sus piernas el fotógrafo se sorprende mucho. Ha visto muchas cosas, mas no algo de esta forma. En general las mujeres están depiladas enteras, mas esta checa rubia tiene el coño lleno de pelo. Es una chavala muy natural y le chifla tener su coño con pelo y además de esto, a su novio le agrada. Se abre de piernas y frota un tanto su coño para las fotografías. Entonces se pone a 4 patas para enseñarle a su novio de qué forma podría estar follándola. Al terminar la sesión, le manda las fotografías a su novio y el tío se sube por las paredes.
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