Tenemos con nosotros a una pelirroja, a la tradicional y protuberante ama de su casa que decide ponerse bien cachonda cada 2 por 3 y que agrada de caminar llamando la atención toda vez que puede. Mas lo peor de esto es que la muchacha no anda realmente bien de la cabeza y ha ocurrido que le ha dicho su hijo que sacara la cámara pues le iba a hacer unas fotografías desnuda en exactamente la misma casa y que no se iba a arrepentir. Desde entonces, de este modo ha sido pues la mujer es increíble. Cuando la he visto con ese vestido amarillo levantado, he comprendido que es una de las maduras amas de sus casas que más cachondo me han puesto en los últimos tiempos, una mujer de bandera como las que ya no quedan.
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