A este chaval le ha tocado la lotería, y eso no es una expresión banal. Se ha podido joder a una rubia madura con unas tetas increíbles, pasmantes, de las que te hacen alucinar cuando las ves. Es la habitual madura que se ha operado varias veces en la cara y pasando por el quirófano un día decidió ponerse unas tetas enormes. A mí, que cuanto más voluptuosa sea una mujer, más me agrada, he gozado de lo bonito con esta galería porno. El chaval, que semeja muy poquita cosa, le ha logrado meter la polla hasta el fondo y hacerla disfrutar como la perra que es. La mujer, hasta el momento en que no tiene el coño prácticamente destrozado de llevarse varios puntazos, no se ha quedado sosegada. Guarras como hay pocas, la verdad.
0 Comments