Me siento más que orgulloso de la buena follada que le he echado a mi novia secretaria. Una chavala que ahora rondará los 30 años y que desde el primer instante en que la vi me quedé absolutamente enamorado de ella. Es la habitual rubia que además de tener un buen cuerpo, prácticamente escultural, es sumamente guapa, tiene una belleza naturaleza realmente difícil de lograr. La cuestión es que al fin tras varios meses tirándole los tejos he lograd follármela en mi escritorio de caoba. Y me he dado cuenta de que sus tetas no eran naturales, sino más bien operadas, mas he seguido adelante y me la he follado con una fuerza que hacía un buen tiempo que no sentía. Debo decir que al comienzo de lo excitado que estaba prácticamente me corro prematuramente mas al final pude resistir y terminé echando el mejor polvo que recuerdo en mis últimos 5 años de vida sin exagerar.
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