Esta chavala salida semeja que desea pasar un buen rato con su novio en la playa, y lo cierto es que no podemos decir lo opuesto. Lo ha manejado con perfección. Desde hace ya tiempo ya tenía en su interior las ganas de hacer una sesión de fotografías erótica en la playa. Se lo solicitó a su mejor amigo pues la chavala no tiene escrúpulos, sencillamente le dio la cámara, se comenzó a eliminar la ropa y le solicitó por favor que se esforzase para sacar sus mejores curvas. El tipo ni corto ni perezoso accedió a sus súplicas y le hizo una galería que nunca podría olvidar; todo con tal de sentir el morbo de ver a su mejor desnuda, por ver se coño que en tantas ocasiones se ha imaginado de la manera en que verdaderamente es y ese trasero que en tantas ocasiones se quedaba mirando toda vez que la chavala se daba la vuelta.
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